Actualmente tienden a considerarse dos grandes grupos o categorías ciertas manchas en la piel del recién nacido. Una de ella son los denominados hemangiomas y la otra son las malformaciones vasculares (angiomas planos). Otras manchas que pùeden observarse son las petequias.
Los “hemangiomas “se presentan como pequeñas manchas de color rojo o azulado siendo de rápido crecimiento en los primeros meses de vida (deteniéndose en su evolución a partir de los seis meses de vida). Los hemangiomas (al principio planos y luego con relieve) son debidos al agrupamiento en la piel de cierta cantidad de vasos sanguíneos. Parece ser que existe un mayor predominio de aparición en los niños que en las niñas.
En cuanto a su desaparición hay que significar que ciertos hemangiomas suelen desaparecer antes de que el niño cumpla los cinco años, mientras que otros no desaparecen hasta los nueve años.
Los hemangiomas pueden localizarse en la cara, cuello (denominados en este caso picotazo de cigüeña), ojos (denominados besos de ángel), nariz, labios o cuero cabelludo. Aquellos localizados en la cara que pudieran dar lugar a asimetrías faciales son tributarios de ser intervenidos quirúrgicamente (microcirugía) no sin antes intentar un tratamiento médico. Se considera que son tributarios de ser intervenidos precozmente aquellos hemangiomas situados en la zona palpebral, nariz, labios y cuero cabelludo.
De entre los hemangiomas hay que distinguir los hemangiomas en fresa ( denominados así por su aspecto que recuerda una fresa) los cuales son de color rojo vivo tiendiendo a desaparecer sin tratamiento alguno hacia los nueve años y los hemangiomas cavernosos de color azulado los cuales desaparecen por si solos.
Los “angiomas planos” son unas manchas rojo-violaceas que se presentan desde el nacimiento que van creciendo lentamente no sufriendo regresión alguna excepto aquellos situados en los párpados, nuca o en cara (frente) puesto que en estos casos no son propiamente angiomas planos sino dilataciones de los vasos sanguineos . En general con los años van disminuyendo en intensidad o terminan por desaparecer. En ocasiones los angiomas son muy grandes y pueden sobresalir un poco.
En el caso de que comporten algún problema estético los angiomas pueden tratarse mediante la técnica del laser para aclarar su color (imagen estética).
La llamadas “petequias” son unas manchitas de color rojo-violaceo de frecuente aparición en la infancia debidas a la extravasacion de sangre desde los capilares sanguineos . Normalmente aparecen en la cara y cuello siendo producidas por un esfuerzo ( toser,vomitar etc) o por alguna infeccion virica.
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