Si hace unos días hablábamos sobre las recomendaciones a tener en cuenta antes de adquirir el moisés, hoy vamos a tratar las recomendaciones que los padres deben tener en cuenta en el día a día, tanto por sus características como por su uso por parte del  bebé.

En cuanto al moises. El moisés debe tener una base amplia y estable así como su fondo debe ser rígido y plano. Su colchón debe ser acolchado y bien sujeto para que no pueda volcarse si alguien le da un golpe. Es indispensable poner en sus laterales un protector tambien acolchado, para que, de esta manera, los bebés tengan un lugar donde apoyarse. Si el moisés no tiene patas es mejor colocarlo encima de la cama o dentro de la cuna (nunca debe colocarse en el suelo). Hay que situar el moisés sobre un suelo horizontal y alejado de toda fuente de calor. Si se estropea o se extravía alguna pieza es mejor no utilizarlo hasta que éste haya sido reparado por un experto. En caso de utilizar un el moisés con trípode hay que vigilar que cuelgue de una estructura segura. Hay que comprobar siempre antes de su compra que el moisés cumpla con la normativa europea.

En cuanto al bebé. Hay que dejar de utilizar el moisés cuando el niño ya se sienta, arrodilla o se levantarse solo. Cuando el bebe esta dentro del moisés éste debe bloquearse en una posición fija para evitar no pueda volcarse si alguien le da un golpe. Si el moisés tiene patas plegables hay que asegurarse que éstas están fijas antes de colocar al bebe en su interior. No debe permitirse que los niños mayores jueguen cerca del moisés sin vigilancia alguna. Hay que pensar que a los dos meses el moisés puede quedarse pequeño.

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