Se habla de muerte súbita cuando un bebé menor de un año, aparentemente sano, fallece de forma repentina.
Aunque el síndrome de la muerte súbita del lactante (SMSL) es poco frecuente (rara vez se presenta después de los 6 meses) no existe ninguna razón clara que explique su causa, puesto que la mayoría de los bebés que fallecen por este síndrome aparentemente no presentaban ningún problema de salud.
Respecto a la predisposición a presentar tal síndrome hay que considerar:
Por lo que respecta al bebé:
- Edad: parece ser que la máxima incidencia del SMSL se presenta entre los 2 y los 4 meses de vida siendo poco común antes del mes y después de los seis meses.
- Sexo: tres de cada cinco de los lactantes fallecidos son varones.
- Alimentación: parece ser más frecuente en aquellos lactantes alimentados con lactancia artificial.
- Antecedentes patológicos: infecciones o fallos (apneas) respiratorios, problemas cardíacos y tendencia a reflujo gastroesofágico.
- Postura al dormir: la postura en la que duerme (si duerme boca abajo se dificulta la renovación de aire provocando la inspiración de anhídrido carbónico.
Por lo que respecta a la madre:
- Antecedentes de aborto, anemia, adicción al tabaco.
En relación al entorno o ambiente:
- Horario: la mayoría de los casos se produce durante la noche mientras el bebé duerme.
- Época del año: es más frecuente en invierno debido al exceso de abrigo y calefacción lo que hace que la temperatura ambiental sea superior a 20º.
- Antecedentes familiares: algún hermano fallecido por esta causa.
- Tabaquismo: fumadores en el entorno aumenta las posibilidades de SMSL.
Muchas son las medidas recomendadas para evitar la presentación de este síndrome entre ellas.
- No es conveniente que el bebé duerma boca abajo sino que hay que colocarlo preferentemente boca arriba o ladeado (si presenta regurgitación).
- Colocar un cochón rígido en la cuna así como eliminar edredones ,almohadas en las que pueda hundir la cabeza mientras duerme.
- Tapar el bebé hasta la altura de los hombros dejando que los brazos queden por fuera dela sabana para evitar que la cabeza quede cubierta por la ropa de la cama. De esta manera se evita que la cabeza quede cubierta por la ropa de la cama.
- Procurar que los pies del bebé contacten con el borde inferior de la cama.
- Controlar la temperatura de la habitación (no debe ser superior as los 20 grados).
- No abrigarlo en exceso.
- Evitar la exposición pasiva al tabaco (no fumar en los alrededores).
- Evitar el colecho o codormir pues ello aumenta la temperara corporal.
- Alimentar al bebé mediante lactancia materna (durante los 6 primeros meses ) ya que ello reduce la incidencia de infecciones respiratorias y gastrointestinales a la vea que aumenta las defensas naturales.
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