Se habla de convulsion febril cuando la misma aparece coincidiendo con un cuadro febril alto (fiebre superior a los 38 grados) .
He aqui las caracteristicas de las mismas…
- Pueden presentarse en niños predispuestos aunque la temperatura no sea muy elevada. (aunque luego asciende de manera brusca).
- Son las más frecuentes durante los primeros años de vida del niño.
- Las convulsiones afectan a ambos lados del cuerpo.
- Su duración oscila desde unos pocos segundos hasta unos cinco minutos más o menos, en los que el niño agita involuntariamente los brazos y pone los ojos en blanco.
- Es posible que la crisis se repita (recidiva) por lo que es preciso llevar a cabo ciertas medidas preventivas con objeto de disminuir el riesgo de las mismas
- Es conveniente después de una crisis convulsiva que el niño sea visitado por el pediatra.
- Las crisis convulsivas no dejan secuelas en ningún caso.
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En primer lugar hay que considerar que la fiebre es un mecanismo de defensa natural que el organismo pone en marcha para combatir una infección (generalmente por virus o por bacterias). Sin embargo la fiebre también puede ser producirla por otros procesos entre ellos el exceso de calor o abrigo, la deshidratación o también como reacción secundaria a la administración de una vacuna, etc…
La “fiebre” (elevación de la temperatura por encima de la considerada normal) es uno de los motivos más frecuentes de preocupación y de consulta pediátrica por parte de los padres, siendo considerada como una respuesta o mecanismo de defensa del organismo ante una situación anormal. Se define también como fiebre cualquier temperatura que supere los 38.7º C.
Puede afirmarse que el bebé tiene fiebre a partir de los 38ºC.(si se toma la temperatura rectal). A partir de los 37.5ºC. (si se toma la temperatura en la axila), desde los 37,6º C. (en la boca) y a partir de los 38.3º C. (si se toma en el oído).
